En diferentes estancos y tiendas de Baranoa, Sabanalarga y Santo Tomas, la Policía del Atlántico, incautó más de 95 botellas de licor adulterado y de contrabando, que pretendía ser comercializado en los municipios del departamento.
Las botellas eran de aguardiente, de la marca Aguardiente Antioqueño, tapa azul, de 75, 1000 y 2000 ml. De acuerdo con el parte de la Policía, estas no cumplían con la documentación respectiva que acreditan su legalidad, presentaban inconsistencia en estampilla, sello y les hallaron contenido, al parecer, adulterado. La mercancía estaba avaluada aproximadamente en $2.100.000.
Según investigaciones, la mayoría del licor adulterado se distribuye en estancos y abarrotes mayoristas, donde se camufla con el licor legal. Así, el licor adulterado se dispersa por todo el departamento.
La Policía de Atlántico hizo un llamado a los consumidores de licor a que revisen la calidad del material del empaque, ya que los productos originales son 'impecables' en su presentación. De igual forma, invitó a comprobar que la estampilla de la tapa esté totalmente adherida y que no haya espacios ni ranuras.