Jorge Lora Reyes muestra el palo de madera, de poco más de un metro, con el que vándalos golpearon hace una semana la puerta de su casa, en el barrio Las Moras, municipio de Soledad. Dice que lo hicieron en reclamo por no dejarlos consumir drogas en la cancha de fútbol y el parque que colinda con las viviendas del sector, en la carrera 17B con 64.
Pone a un lado el madero y, por segundos, da un vistazo nostálgico a la calle, como quien añora el tiempo pasado. 'Esto antes no se veía. Viene sucediendo desde hace dos meses y medio, hasta hay vendedores de droga. Los sacaron del parque Los Pitufos y ahora quieren apoderarse de la cancha', comenta Lora Reyes, mientras camina hacia la terraza.
Minutos antes, otros vecinos de la cuadra se mostraron preocupados por el hecho y advirtieron, al igual que él, que se trata de una de las pandillas que vienen generando constantes enfrentamientos con piedras sobre la calle Murillo, a la altura del puente peatonal de la carrera 18. Buses del sistema de transporte masivo, Transmetro, han resultado abollados e incluso un pasajero resultó herido en una de las pedreas.
'Ya hablamos con la Junta de Acción Comunal y el comandante de la estación de Los Almendros. Se dieron unas charlas estos días para formar frentes de seguridad', explica Roberto Nieto, sargento de la Policía, quien vive hace 20 años en el barrio. Camina bajo la sombra de un árbol de bonga del parque y observa a decenas de niños de una escuela jugar en los columpios y atracciones del lugar.
A las 10 de la mañana la cancha y el parque ofrecen una sana diversión a los menores de edad, mientras algunos residentes del sector los ven jugar desde las terrazas de sus hogares.
Lora Reyes señala que los vecinos han hablado en varias oportunidades con los jóvenes de la pandilla para que no afecten la tranquilidad del sector. Cree que la mayoría son menores de edad y asegura que se hacen llamar los ‘Eso.va’, mientras señala con el índice el apodo pintado sobre el asfalto colindante al parque.
Algunos vecinos creen que el otro grupo con el que se enfrentan se hace llamar ‘Los Antipáticos’ y vienen de los lados de Villa de las Moras. 'Aquí llegan a las 4 o 5 de la tarde. Se quedan ahí y cuando son las 7 de la noche salen para allá (La Murillo) a tirar piedras', indica Lora Reyes, alzando el brazo izquierdo hacia la avenida.
Nieto explica que la pandilla también suele llegar al mediodía. Que han dañado algunos juegos del parque y espera que las autoridades los apoyen para mejorar la seguridad de la comunidad. A algunos vehículos de un parqueadero cercano a la cancha, dicen los celadores, les han partido los vidrios. Una buseta vieja es una de las afectadas.
Transmetro
La empresa Transmetro informa que, en lo que va del año, se han presentado 11 casos en los que enfrentamientos entre pandillas han afectado a buses: tres en Barranquilla y ocho en Soledad.
De los casos en el municipio, cinco acontecieron en el sector de la calle Murillo con carrera 18, y el resto cerca a la cancha del barrio Don Bosco y en Villa Sol.
La estación Pacho Galán, localizada sobre la troncal, entre carreras 16 y 17 de Soledad, también se ha visto afectada por los actos vandálicos; al igual que la estación Parque Cultural, en la carrera 46, entre carreras 36 y 39, en Barranquilla.
Las rutas perjudicadas han sido la A6-6 Ciudadela, la A5-2 Las Moras, la A6-5 Carrizal, la A5-3 La Central, la A3-4 Villa Sol y la R1-S1.
Testimonio
Kevin Caballero, de 24 años, fue víctima de las pedreas generadas en los enfrentamientos entre pandillas en Soledad, el pasado 21 de julio, cuando se transportaba en un bus de Transmetro. El hecho ocurrió a la altura de la estación Pacho Galán. Una piedra impactó una ventana, y el vidrio le cortó la frente y el tendón del dedo índice izquierdo.
'Soy zurdo, así que esto ha afectado mi vida laboral porque estoy incapacitado. Trabajo en una empresa de diseño gráfico y no se sabe si después pueda recuperar la movilidad de mi mano. Soy una víctima de estos enfrentamientos', afirma el joven, vía telefónica.