Compartir:

En una casa abandonada en el barrio Villa Ester, en el municipio de Malambo, fue capturado Wiston Rafael Pereira Pedraza, de 37 años, señalado de asesinar a su compañera sentimental en la casa que compartían en el sector de El Golfo, en el barrio Rebolo.

Diana Candelaria Samper Parrao, de 42 años, estuvo recluida en el Hospital Barranquilla desde el pasado 21 de junio, cuando fue víctima de golpes con una pala y de cuchilladas en el cuello.

Murió la tarde del 6 de julio, poco después de que el presidente de la República Juan Manuel Santos sancionó la Ley Rosa Elvira Cely, a través de la cual se tipificó en Colombia el delito de feminicidio que contempla penas superiores a las del homicidio.

Pereira Pedraza sería el segundo hombre procesado por feminicidio en el Atlántico, si la Fiscalía le imputa cargos por este delito. El primero fue Deiver Esmeral, tras entregarse a la Fiscalía y reconocer que estranguló a su pareja, la enfermera Viviana Lamadrid, en medio de una discusión en el barrio San Vicente, en Soledad.

La captura de Pereira fue efectuada por personal de la Sijín y el CTI de la Fiscalía.

Lo que sucedió. El día del ataque, según familiares y vecinos, la pareja estaba sola en la casa situada en la carrera 29A con calle 6. Eran las 8 de la noche cuando Pereira Pedraza empezó a atacar con un cuchillo a Diana Samper, con quien sostenía una relación desde hacía nueve años.

El alto volumen de los equipos de sonido de los vecinos que celebraban el paso de la Selección Colombia a los cuartos de finales de la Copa América, al parecer no dejo que la gente oyera los gritos de auxilio de la mujer.

Los familiares dijeron desconocer el motivo de la discusión.

Tras atacar a su pareja, Winston Pereira, o el Ronco, como es conocido por su tono de voz, salió de la casa, e incluso saludó a varios de sus vecinos sin levantar sospechas.

Un familiar que llegó poco después a la vivienda encontró a Samper malherida, en el piso. De inmediato fue trasladada al centro asistencial donde falleció días después.

Tras la muerte de Samper, una hija de la víctima advirtió que el hombre la llamó varias veces por teléfono preguntándole por su estado. 'Me decía que se la pasara y luego me amenazaba con matarme a mí. Yo no le daba razón de la salud de mi mamá', dijo la joven en su momento.

Allegados a la pareja indicaron además que él solía maltratarla y que por ello llegaron a recomendarle que lo abandonara, pero nunca accedió a hacerlo.