Diez años después del asesinato del joven barranquillero Orlando Villarreal Cortés, víctima de un ‘falso positivo’ por parte de militares del Batallón La Popa, de Valledupar, su madre Aida Cortés sigue esperando a que le entreguen los restos de su hijo 'para darles cristiana sepultura'.
A pesar de conocer la noticia de la medida de aseguramiento que profirió la Fiscalía en contra del sargento Néstor Jiménez Corredor, por su presunta participación en el homicidio de su hijo, Aida se mostró 'un poco tranquila', porque según ella ya se empezó a hacer justicia con su hijo.
Sin embargo, la angustia de no poder rescatar los restos de su hijo, a pesar de que por fin ya sabe dónde están, no la deja en calma.
'A mi hijo lo mataron en el 2004 y duró dos años en una bóveda, pero nos dijeron que como no aparecieron familiares lo habían sepultado en una fosa común y no es así porque ya sabemos que están en una bóveda del cementerio Ecce Homo de Valledupar'.
Según Aida Cortés, ya son 8 años que lleva luchando para que las autoridades le entreguen los restos del penúltimo de sus cinco hijos, pero lo único que recibe como respuesta es que no hay presupuesto para hacer la exhumación.
'No es lo mismo saber que está muerto, pero no tenemos un sitio dónde llevarle una flor, saber qué está sepultado', dijo Luz María Villarreal, hermana de Orlando Villarreal.
De acuerdo con el familiar, la medida de aseguramiento en contra del sargento Néstor Jiménez 'está bien', pero falta que los que dieron las órdenes para las ecujecuciones extrajudiciales estén presos.
'Todos sabemos quiénes son, el actual presidente de Colombia y el ahora senador Álvaro Uribe, ellos son los responsables no solo de la muerte de mi hermano sino de muchos otros jóvenes que fueron asesinados en Colombia', dice Luz María Villarreal.
En cuanto a la decisión en contra del sargento Néstor Jiménez Corredor, la Fiscalía 67 de Derechos Humanos de Bucaramanga señaló que 'la muerte se dio por parte de miembros del Ejército Nacional, Batallón La Popa, con reporte que hicieran de esas bajas en supuesto combate armado', ya que con Orlando Villarreal Cortés fue asesinado otro joven.
Cumplió años de vida. El pasado 10 de abril Orlando Villarreal Cortéz cumplió 42 años de vida y pese a su ausencia, su madre y demás familiares no dejan de celebrarlo.
Aida Cortés recuaerda que cuando su hijo se fue la llamaba casi todos los días para decirle que se encontraba bien y que ya estaba trabajando, 'incluso el día de su cumpleaños también me llamó para felicitarme, yo me reí y también lo felicité', recordó Aida Cortés.
'Esa medida de aseguramiento para mí es una luz, pero quiero más luz al igual que todas las madres a las que el Ejército nos mató a nuestros hijos, no voy a descansar hasta que se haga justicia, ya son diez años de sufrimiento', dijo Aida.
