Un niño de 10 años resultó quemado con un buscapiés durante la celebración de la novena a la Virgen de la Inmaculada Concepción en el municipio de Manatí, la noche del lunes anterior.
El incidente se dio en medio de la ‘vaca loca’, práctica tradicional en la población que consiste en lanzar elementos con pólvora en diferentes direcciones, en el evento religioso. En 2012 dos hermanos, también menores de edad, sufrieron quemaduras en circunstancias similares.
En cuanto a la víctima de este año, que es la primera en el Atlántico en la temporada decembrina, fue enviada a su casa horas después del hecho pues su estado no reviste gravedad.
De acuerdo con el director del Hospital de Manatí, Álvaro Caicedo Morales, el menor sufrió una quemadura de primer grado en el costado derecho del pecho. 'El niño fue atendido, dado de alta y regresó para las curaciones que debemos hacerle', confirmó.
El funcionario recalcó que la entidad a su cargo adelanta labores preventivas sobre el mal uso de la pólvora para evitar que estos hechos se sigan presentando, pero al mismo tiempo su equipo se ha preparado haciendo simulacros para atenderlos. Igualmente, la institución está en alerta por la realización de las corralejas, en esta temporada.
Así mismo, el alcalde municipal, Abel Devia, dijo que pese a que se ha prohibido la utilización de este tipo productos, se hizo caso omiso a la medida.
Amonestación. Frente al caso, la directora (e) de la regional Atlántico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Yolanda Ruiz, confirmó que a los padres del niño se les impuso una amonestación, lo que representa un llamado de atención por lo sucedido. 'En estas situaciones, dependiendo de la gravedad del hecho y a la vulneración de los derechos de los menores la sanción puede ser la pérdida de la patria potestad de los niños', sostuvo la funcionaria.