El Ministerio de Defensa de Ecuador anunció este viernes que la Armada incautó 4,5 toneladas de droga en una operación ejecutada en alta mar, cerca de las Islas Galápagos, en una ruta usada por narcotraficantes para intentar llevar alcaloides hacia Estados Unidos o destinos en Europa.
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El Ministerio, en un comunicado, calificó a esta operación como la mayor incautación de droga en lo que va del año, e informó de la detención de 17 personas relacionadas con este caso.
La operación, denominada 'El gran golpe', se realizó en la llamada 'Ruta del Desierto, que históricamente ha sido muy utilizada por el narcotráfico' y que comprende un trayecto que une puertos en la provincia costera de Manabí (en el oeste del territorio continental del país) y las Islas Galápagos, situadas a unos mil kilómetros al oeste.
Dicha ruta tiene como destino inicial llegar a zonas en Centroamérica, aunque su fin es alcanzar destinos en Estados Unidos o Europa, señaló el informe difundido por el Ministerio de Defensa.
Según la fuente, las unidades de Inteligencia de la Armada habían trabajado un par de semanas en la zona de la ciudad costera de Manta y finalmente habían ejecutado la operación para capturar el alijo que había sido escondido en un material especial dentro de tubos de caucho.
'También se detuvo a 17 personas, lo que representa la mayor cantidad de aprehendidos en el mar vinculados a mafias que ahora están en manos de la justicia', precisó el Ministerio.
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'El gran golpe' representa algo más del 10 por ciento del total de droga decomisada desde enero pasado, añadió la fuente.
Según estimaciones del Ministerio, con este decomiso 'ya son 42 toneladas incautadas en el mar durante 2024, lo que representan un golpe de 840 millones de dólares a las mafias narcodelictivas' y el retiro de circulación de unas '882 millones de dosis'.
El Ministerio de Defensa aseguró que este nuevo golpe 'se suma al debilitamiento sistemático que la estructura narcodelictiva ha afrontado desde que se fortalecieron las operaciones' contra el narcotráfico, tras el decreto de 'Conflicto armado interno' que aplicó a principios de año, contra el auge de la violencia en cárceles y calles, el presidente del país, Daniel Noboa.
