El huracán de categoría 1 Fiona tocó este domingo tierra en el suroeste de Puerto Rico, donde sus vientos máximos sostenidos de 140 kilómetros por hora (85 millas) y sus fuertes lluvias causaron un apagón general, graves inundaciones y daños catalogados de 'catastróficos'.
Fiona, que hasta el inicio de esta jornada era una tormenta tropical, se fortaleció al acercarse a Puerto Rico y su ojo pasó cerca de Punta Tocón a las 15.20 hora local (19.20 GMT), según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, en inglés).
En su última comparecencia de prensa, el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, reconoció que hay 'daños catastróficos' en la isla, tanto en viviendas particulares como en infraestructuras públicas.
Desde Cabo Rojo, en la costa suroeste, por donde pasó el ojo del huracán, Gilberto A. Ruiz dijo a Efe que 'hay muchas inundaciones, muchos árboles caídos y muchos techos volados'.
'Al principio hubo vientos bien fuertes, luego hubo una calma como por unos 10 minutos, como si no pasara nada, pero ahora vino la otra parte del huracán, y mucho más fuerte', relató el vecino de Cabo Rojo.