Desde que Vladimir Putin, presidente ruso, dio a conocer las supuestas razones por las cuales invadió Ucrania, asociadas a impedir la extensión de la Alianza Atlántica, no se hicieron esperar las reacciones de los países miembros de esta organización.
Estados Unidos, Francia, Reino Unido, entre otros países miembros rechazaron de forma categórica el ataque. Sin embargo, surge la interrogante de por qué esta alianza no interviene de manera directa en la guerra.
La razón más visible ha sido que Ucrania no pertenece a la OTAN, por lo tanto, ninguno de los Estados puede intervenir, al menos no en nombre de la Alianza.