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El primer ministro de Tailandia, Prayut Chan-ocha, tendrá que afrontar una multa de 6.000 bat (190 dólares o 158 euros) por no llevar mascarilla durante una reunión de trabajo celebrada este lunes.

El gobernador de Bangkok, Aswin Kwanmuang, informó en un mensaje en las redes sociales de que el primer ministro vulneró la norma que entró en vigor hoy y hace obligatorio el uso de la mascarilla facial en todo momento fuera de la residencia habitual.

Durante una reunión oficial en la mañana del lunes en la Casa del Gobierno, Prayut se dirigió al resto de participantes sin llevar mascarilla, una imagen que hizo que muchos tailandeses criticaran al mandatario en las redes sociales.

Tras la polémica, la Policía acudió a la oficina del primer ministro para entregarle la multa, informó Aswin.

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Desde este lunes y durante dos semanas están vigentes en Bangkok una serie de restricciones por la pandemia que incluyen además el cierre de parques públicos, bibliotecas, museos y salas de masajes, entre otros, al tiempo que se prohíben reuniones de más de 20 personas.

Estas restricciones se suman a otras que se aplicaban ya en gran parte del país desde principios de abril, en los inicios de la tercera ola, como el cierre de los colegios, la prohibición de la venta de alcohol en bares y restaurantes y los límites del horario de apertura en los centros comerciales.

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Las autoridades sanitarias confirmaron este lunes más de 2.000 nuevos casos y 8 muertos, lo que arroja una cifra total desde el inicio de la pandemia de más de 57.500 infectados y 148 fallecidos.

Tailandia -con una población de casi 70 millones de habitantes- comenzó a vacunar contra la covid-19 el pasado 28 de febrero, pero hasta la fecha solo ha inoculado a unas 972.204 personas (el 1,4 % de la población), de las que más de 177.400 han recibido la segunda dosis, ante la lentitud del suministro.