Dos bases de la Marina de Estados Unidos situadas en la isla japonesa de Okinawa han sido confinadas después de que se detectaran 61 contagios de coronavirus esta semana, informaron las autoridades locales.
Los casos fueron confirmados entre el martes y el sábado en las bases de Futenma y Camp Hansen, situadas en la isla homónima y la mayor del archipiélago del sudoeste japonés, donde se concentra la mayoría de las tropas estadounidenses en el país asiático.
El teniente general Stacy Clardy, comandante de la III Fuerza Expedicionaria de Marines y jefe de las fuerzas estadounidenses en Okinawa, fue quien explicó telefónicamente la situación de la propagación vírica en las instalaciones al gobernador de la región, Denny Tamaki, según recogió la agencia de noticias japonesa Kyodo.
El cuerpo de la Marina explicó que se han producido 'dos grupos localizados de individuos que dieron positivo en el virus' que provoca la enfermedad COVID-19 y que todo el personal contagiado está en aislamiento, detalló el citado medio.
En una rueda de prensa previa a la publicación de las cifras, el gobernador Tamaki se mostró 'conmocionado' por el informe de las fuerzas estadounidenses y declaró que tienen 'serias dudas sobre las medidas (adoptadas por las tropas) para prevenir la propagación'.
Tamaki aseguró que miembros del personal militar estadounidense celebraron fiestas en áreas céntricas y playas para conmemorar la celebración del Día de la Independencia del 4 de julio y pidió a los participantes que visiten a un médico si no se encuentran bien.
La base aérea estadounidense de Kadena y las instalaciones de Camp McTureous, asimismo en Okinawa, también han detectado contagios de coronavirus, según informaron las autoridades locales.
La prefectura de Okinawa, en el sudoeste del país, ha registrado 148 casos de coronavirus, excluyendo los del personal miliar de EE.UU. La cifra supone apenas el 0,7 % de los entorno a 21.500 casos contabilizados hasta este domingo en Japón.
Okinawa alberga más del 70 % de las instalaciones militares de Estados Unidos en Japón y más de la mitad de los cerca de 48.000 efectivos que mantiene en este país.