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Las autoridades de Wuhan, en el centro de China, elevaron hoy el nivel de alerta al segundo más alto de los cuatro que conforman la escala por las inundaciones derivadas de las lluvias torrenciales que azotan la zona.

Según el diario estatal China Daily, en los últimos dos días se han registrado precipitaciones de hasta 250 milímetros que han dejado calles y carreteras anegadas y aguas por encima de los niveles máximos en algunas zonas.

Se espera que estas lluvias continúen a lo largo de los próximos días, por lo que las autoridades decidieron elevar al nivel 2 el nivel de emergencia para inundaciones y desagüe.

En la provincia de la que Wuhan es capital, Hubei, la cercana ciudad de Qianjiang elevó su nivel de alerta por inundaciones al 1, el máximo del escalafón, tras sufrir fuertes lluvias que también han causado importantes daños en las granjas de la zona.

En las últimas semanas, buena parte de China -especialmente las regiones centrales- han registrado unas lluvias torrenciales que han afectado a casi 20 millones de personas, según estadísticas del Ministerio de Gestión de Emergencias.

Aunque esta institución no actualiza las estadísticas de pérdidas humanas por estas últimas inundaciones, sí que publicó esta mañana un dosier que resume los desastres naturales de la primera mitad de 2020, en el que apunta que 119 personas fallecieron o desaparecieron a causa de las inundaciones en el país.

Las provincias de Hubei, Anhui y Hunan elevaron este domingo sus alertas, ya que se esperan más precipitaciones abundantes en los próximos días y los niveles de agua en ríos y lagos continúan elevándose.

En algunas zonas del país se están registrando lluvias entre un 30 y un 50 % más copiosas de lo habitual, y las autoridades meteorológicas prevén que entre este mes y agosto los riesgos a este respecto sean 'relativamente altos', por lo que consideran que la situación es 'grave' en términos de control de inundaciones.

Hasta el pasado 3 de julio, según datos del citado Ministerio, se ha evacuado a 875.000 personas, de las que 355.000 han necesitado 'ayuda urgente'.

Los daños materiales ascienden a 218.000 casas dañadas y 17.000 derrumbadas, mientras que se han perdido unas 160.000 hectáreas de cultivos; las pérdidas económicas directas se sitúan por el momento en 41.640 millones de yuanes (5.929 millones de dólares, 5.241 millones de euros).