La red social Twitter informó hoy de que ha eliminado más de 5.300 cuentas asociadas con Arabia Saudí, que amplificaban el contenido a favor del reino y arremetían contra Catar y Turquía, en la tercera operación de estas características que tiene lugar desde septiembre pasado.
La compañía especificó en un tuit que fueron eliminadas 5.350 cuentas 'asociadas' con Arabia Saudí, que integraban una 'red' que operaba desde varios países árabes, incluido Egipto y Emiratos Árabes Unidos, ambos aliados suyos.
Esas cuentas se dedicaban a 'amplificar contenido alabando el liderazgo saudí y criticando la actividad de Catar y Turquía en Yemen', donde Arabia Saudí interviene militarmente a la cabeza de una coalición militar de países suníes desde marzo de 2015.
Esta no es la primera vez que Twitter toma medidas contra cuentas asociadas o respaldadas por Arabia Saudí.
El pasado mes de diciembre, la red social informó de que había eliminado más de 88.000 cuentas que creaban o contribuían a propagar noticias falsas en el marco de una operación de desinformación que contaba con el beneplácito del Gobierno saudí.
Twitter explicó en aquel momento que los contenidos se generaban desde 5.929 cuentas, que constituían el 'elemento central' de la operación, mientras que la función del resto era ayudar a propagar y multiplicar su alcance.
Desde las cuentas -en su mayoría automatizadas, es decir, controladas por robots- se difundían mensajes positivos acerca de Arabia Saudí y sus autoridades y se ayudaba a 'promover sus intereses geopolíticos en el mundo'.
Unos tres meses antes, Twitter había informado de la eliminación de 267 cuentas originadas en Emiratos Árabes Unidos y Egipto, que compartían los mismos objetivos y tácticas: una operación de información multifacética atacando a Catar y otros países como Irán, y apoyando al Gobierno saudí.
Según un informe de la red social, se encontraron pruebas de que habían sido creadas y manejadas por la compañía de tecnología privada con base en Emiratos y Egipto DotDev.
Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Egipto son aliados políticos y se posicionan en contra de Irán y de los países árabes más cercanos a Teherán y al movimiento islamista Hermanos Musulmanes, como Catar y Turquía.