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Luego del anuncio del Presidente sobre la suspensión de bares y restaurantes y de todo el comercio en Italia, queda por preguntarse: ¿Qué puedo hacer? hoy cuando se añade otra restricción relacionada con frecuentar parques, los cuales no podrán ser visitados.

¡Por hacer, aunque no lo creamos, hay mucho!, sobre todo para quienes trabajamos desde casa. Así resulte triste el no poder jugar con nuestros hijos en medio a una espléndida jornada de sol primaveril. La prioridad es conferir a cada quien un espacio para desarrollar las actividades propias, como las de mi hijo quien se colocó a hacer las tareas que todos los días le envía su maestra por e-mail o con videos didácticos que implican un ejercicio por desarrollar en tiempos específicos.

Desde horas de la mañana recibí mensajes de amigos provenientes de Barranquilla, residentes en otros países europeos como Francia y España. Me escriben para desahogar sus temores o preguntarme dudas ya que en ciertos países aún no han cerrado escuelas o gimnasios y aun se dan la mano para saludar. El celular se convierte en un medio liberador en cierto sentido, pero también esperanzador, sobre todo para mis contactos italianos que lo utilizan para difundir mensajes de solidaridad mutua y buenas noticias. No se diría, pero hoy surgieron importantes avances que nos refrescan como un viento fresco en el desierto.

Pues bien, ésta noche acaba de llegar una delegación de 9 médicos provenientes de China con experiencia certificada en el tratamiento del Covid-19 para soportar a sus colegas italianos en muchos aspectos, no sólo con su experiencia sino también con 30 toneladas de material médico antiviral.