La selección italiana de fútbol visitó este sábado Venecia, donde se decretó el estado de emergencia para hacer frente a la devastación provocada por las inundaciones, un día después de ganar 3-0 a Bosnia en la clasificación para la Eurocopa 2020.
Esta visita coincide igualmente con el anuncio de un acuerdo de patrocinio entre la cuatro veces campeona del mundo y el aeropuerto de Venecia.
El portero Gianluigi Donnarumma y el presidente de la federación Gabriele Gravina se pusieron botas de agua y pisaron la emblemática plaza de San Marco, todavía cubierta de agua, que fue reabierta al público este sábado.
El martes, Venecia padeció sus peores inundaciones en 53 años, cuando llegó a 187 centímetros. El agua invadió iglesias, museos y hoteles de esta ciudad incluida en el patrimonio mundial.
'Estamos con la ciudad de Venecia. En el nombre de todo el equipo', declaró el arquero del Milan.
'Venecia es una ciudad herida, pero fuerte y maravillosa, ha probado su gran carácter y una extraordinaria capacidad para seguir de pie', añadió Gravina.
La delegación visitó varios lugares dañados por las inundaciones, hablando con los vecinos, los voluntarios y la policía.
'Venecia superará esto también. Como un deportista que sufre una lesión grave, se recuperará', declaró el jefe de la delegación, el antiguo internacional Gianluca Vialli.
Los Azzurri cierran su brillante clasificación para la Eurocopa en Palermo ante Armenia. El equipo dirigido por Roberto Mancini tiene la posibilidad de lograr su décima victoria en diez partidos.