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Los bombardeos del régimen sirio mataron en siete días a 500 civiles, entre ellos 121 niños, en Guta oriental, un enclave rebelde cerca de Damasco, informó este sábado una oenegé.

El balance aumentó tras el hallazgo de nuevos cuerpos bajo los escombros y la muerte de más civiles este sábado, precisó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

'Detengan la masacre'

Todos los días se recuperan cuerpos de entre los escombros y el balance no deja de aumentar, dijo la oenegé.

'No se pueden imaginar lo que está pasando en Guta', dice con rabia a la AFP Salem, un habitante de Duma.

'Esperamos de Europa y Estados Unidos, que se preocupan por la vida de un gato y de un perro, que reaccionen mientras cientos de civiles mueren por bombas sirias, rusas e iraníes a la vista de todos', dijo.

'¿Cómo es posible que el Consejo de Seguridad no pueda adoptar una simple resolución para un alto el fuego contra los civiles? No queremos que nos den algo para comer o beber, sólo que detengan la masacre', añadió.

Tras los bombardeos en Duma, varios cuerpos, entre ellos los de de niños, fueron transportados a un hospital improvisado, constató un periodista de la AFP. Envueltos en cobijas, los cadáveres fueron alineados en una habitación convertida en morgue.

El ruido de los intensos bombardeos en Guta se escuchó hasta altas horas de la noche en algunos barrios de Damasco, vecinos del bastión rebelde, indicó un periodista de la AFP.

En respuesta a los ataques, los rebeldes dispararon cohetes contra Damasco que no dejaron víctimas, dijo la agencia oficial Sana. Desde el 18 de febrero, unas 20 personas han muerto por disparos de cohetes, según medios oficiales.

Conocida como el huerto de Damasco por sus tierras agrícolas, Guta oriental es el último bastión rebelde cerca de la capital y lleva desde 2013 asediada y sometida a bombardeos casi diario. Sus 400.000 habitantes sufren escasez de alimentos y medicinas.

La guerra en Siria, que empezó en marzo de 2011 con la represión brutal de las manifestaciones que pedían reformas democráticas, se ha complicado con la implicación de grupos yihadistas y potencias regionales e internacionales.