El líder independentista Carles Puigdemont afirmó este martes que 'no hay ningún otro candidato posible' a la presidencia de Cataluña, luego de que el parlamento regional decidió aplazar su investidura, que antes había sido bloqueada por el Tribunal Constitucional.
Las declaraciones se conocen luego de que los independentistas de Cataluña dejaron al descubierto sus divisiones tras la decisión del presidente de su parlamento, bajo presión de la justicia española, de aplazar la investidura del independentista Carles Puigdemont, que se reivindicó como único candidato posible a presidir la región.
'El pleno de hoy queda aplazado' hasta tanto haya garantías de un debate 'efectivo y con garantías' para Puigdemont, anunció Roger Torrent, sin precisar una nueva fecha.
El anuncio fue aplaudido por el gobierno central de Mariano Rajoy, quien había advertido a Torrent de 'responsabilidades' judiciales si seguía adelante con el pleno en ausencia de Puigdemont, instalado en Bruselas evadiendo una investigación en España por rebelión y sedición.
'Se ha evitado que hoy se hubiera producido una burla a nuestra democracia', indicó el Ejecutivo español en un comunicado.
En cambio, decepcionó a Puigdemont que en un vídeo publicado en las redes sociales lamentó la decisión y acusó al Estado español de hacer 'el chantaje de obligar a escoger un presidente y un gobierno que les complazca'.
Y si bien pidió respeto hacia el presidente parlamentario y unidad en las filas independentistas, dejó claro que no piensa tirar la toalla: 'No hay ningun otro candidato posible ni ninguna otra combinación aritmética posible' a la mayoría independentista obtenida en las elecciones del 21 de diciembre.