Los rebeldes de Sudán del Sur dejaron en libertad el jueves a 18 miembros de las fuerzas de paz, pero aún tenían cautivos a 12 contratistas de la ONU que capturaron en unas barcazas en una zona conflictiva del país africano, dividido por la guerra, informaron funcionarios de la ONU.
Los rebeldes tomaron las embarcaciones porque sospechaban que transportaban armas para tropas gubernamentales.
Aunque en agosto las facciones en guerra de Sudán del Sur firmaron un acuerdo de paz, la lucha continúa, sobre todo en los disputados estados Alto Nilo y Unidad.
El lunes, una barcaza que cargaba combustible en el río Nilo fue bloqueada en Kaka por más de 100 hombres muy armados afiliados con rebeldes, quienes detuvieron a las fuerzas de paz y a la tripulación de la embarcación. Tanto el combustible como las armas fueron robados, decía una declaración de la ONU.
'UNMISS está muy preocupada de que no se haya liberado al equipo nacional y la barcaza. La barcaza no ha sido devuelta a las Naciones Unidas, tampoco el equipamiento', decía la declaración y exhortaba al líder rebelde Riek Machar de liberar a los contratistas.
Dos soldados gubernamentales, tres agentes de seguridad nacional de Sudán del Sur y seis técnicos de las embarcaciones seguían detenidos, agregó el vocero rebelde local, Nyagwal Ajak Dengkak.