Una francesa que fue secuestrada en febrero en Yemen junto con su traductora está en camino a Francia este viernes luego de haber sido puesta en libertad. Isabelle Prime, de 31 años, trabajaba en Yemen para el Banco Mundial de Alimentos cuando fue secuestrada.
La agencia de noticias estatal de Omán citó a un funcionario no identificado del Ministerio de Asuntos Exteriores confirmando que Prime llegó al sultanato la madrugada del viernes en preparación para su repatriación a Francia. Omán participó en la negociación de su liberación en coordinación con 'algunas partes de Yemen', tras una solicitud de ayuda del gobierno francés, según el informe.
La cooperante regresará a Francia el viernes por la noche, informó el canciller galo, Laurent Fabius, quien junto al presidente agradeció la ayuda del sultán de Omán en el caso. Fabius dijo que Francia no pagó ningún rescate.
'Francia no paga, pero al mismo tiempo estamos muy atentos a la realidad humana. Lo que cuenta al final de la cadena es que terminamos la recuperación de uno de los nuestros', dijo a la televisión BFM. 'Se puede imaginar lo complicadas que son las negociaciones'.
Omán limita con Yemen y se distingue de sus vecinos del Golfo Pérsico al mantener relaciones cordiales con Irán, que apoya a los rebeldes chiíes hutíes que luchan en Yemen.
La nación de la península Arábiga ha participado en la liberación de otros cautivos, entre ellos el periodista independiente estadounidense Casey Coombs, quien fue liberado por los rebeldes hutíes a principios de este año.
Omán también fue intermediario en la liberación de tres excursionistas estadounidenses detenidos por Irán cerca de la frontera con Irak en 2009. Sarah Shourd, uno de los excursionistas, fue puesta en libertad después de más de 13 meses secuestrada. Sus compañeros de excursión Josh Fattal y Shane Bauer fueron condenados luego como espías, pero también fueron puestos en libertad un año después de la liberación de Shourd.
No se divulgaron los detalles de la liberación de Prime, como el nombre del grupo que la retenía.
Prime fue secuestrada en la capital, Saná, que está bajo control de los rebeldes, junto a su traductora yemení, quien fue liberada poco después.
A principios de año se publicó un video que mostraba a Prime pidiendo ayuda. En la grabación parecía frágil y angustiada y pedía a los líderes de Francia y Yemen que le ayudaran a regresar a su país.
El caos reina en el empobrecido Yemen, mientras fuerzas progubernamentales combaten a rebeldes chiíes.