Compartir:

El príncipe Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono británico, es desde hoy empleado de la compañía que opera el servicio de ambulancias aéreas de la región de East Anglia (este de Inglaterra), informó un portavoz del palacio de Kensington, su residencia oficial.

El duque de Cambridge, que hasta septiembre de 2013 ejerció de piloto de helicópteros de rescate para la Real Fuerza Aérea británica (RAF), 'comenzó hoy a trabajar como empleado de Bond Air Services' y guiará sus primeros vuelos en los próximos meses, señaló el portavoz.

El príncipe, de 32 años y que espera en las próximas semanas el nacimiento de su segundo hijo con su esposa, la duquesa Catalina, manejará helicópteros ubicados en los aeródromos de Cambridge y Norwich, en turnos tanto diurnos como nocturnos.

'Durante los próximos meses se someterá a un entrenamiento específico para este trabajo, antes de comenzar a pilotar misiones para el servicio de ambulancias en verano', informó el palacio de Kensington.

Guillermo se entrenará en un simulador y participará en vuelos como copiloto antes de ponerse a los mandos de una de las ambulancias aéreas que opera la compañía Bond Air Services.

Como piloto del servicio de East Anglian Air Ambulance (EAAA), Guillermo pilotará un helicóptero EC145T2 y colaborará con médicos para responder a toda clase de situaciones de emergencia, desde accidentes de carretera a ataques cardíacos.

Su salario, de unas 40.000 libras (58.500 euros), según el tabloide 'Daily Mail', será donado a organizaciones sin ánimo de lucro.

Esta será la principal ocupación del duque de Cambrdige durante los próximos años, si bien sus turnos laborales tendrán en cuenta 'sus deberes y responsabilidades' para representar al Reino Unido tanto dentro como fuera de la Gran Bretaña, advirtió la Casa Real.

La compañía Bond Air Services, para la que trabaja desde hoy el heredero al trono británico, es propietaria de los helicópteros que utilizan diversos servicios de ambulancias y policía en el Reino Unido.

En noviembre de 2013, un helicóptero modelo Eurocopter EC135 de esa compañía que utilizaba la policía escocesa se precipitó sobre un pub en Glasgow, un accidente que dejó diez víctimas mortales.