La reina Isabel II de Inglaterra asistió hoy en la catedral de San Pablo, en Londres, a una ceremonia religiosa en homenaje a los 453 militares británicos muertos durante la guerra de Afganistán.
La soberana de 88 años, vestida con un conjunto de color azul oscuro y sombrero a juego, estuvo acompañada de su esposo, el duque de Edimburgo, y sus cuatro hijos, el príncipe Carlos, Ana, Eduardo y Andrés.
También asistieron sus nietos, el príncipe Guillermo, que estuvo acompañado de su esposa, Catalina, embarazada de ocho meses, y Enrique, quien ha servido en Afganistán en dos ocasiones.
La ceremonia marca el final de la participación británica en el conflicto afgano, que siguió a los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y Washington y que se ha prolongado durante trece años.
Hasta 140.000 soldados británicos formaron parte de la coalición encabezada por Estados Unidos, que invadió Afganistán en 2001 para derribar el régimen de los talibanes.
'Hoy es un día en el que debemos expresar agradecimiento, dar gracias a los que sirvieron en Afganistán, sin importar el papel que desempeñaron', dijo el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, durante el servicio, al que acudieron numerosos veteranos del conflicto.
El primer ministro británico, el conservador David Cameron, y el viceprimer ministro, el liberaldemócrata Nick Clegg, asistieron al servicio, al que le siguió un desfile junto a la catedral de San Pablo y una exhibición área de aviones y helicópteros de la Fuerza Área Británica (RAF, en sus siglas en inglés).
Tony Blair, el jefe de Gobierno cuando se envió el primer contingente británico a Afganistán, estuvo también presente, al igual que su sucesor en el cargo, Gordon Brown, y el actual líder del Partido Laborista, Ed Miliband.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, expresó su agradecimiento a los militares británicos muertos en el conflicto.
'Sacrificaron su vida para permitirnos vivir en libertad y con la esperanza de la paz, la prosperidad y la dignidad', dijo Ghani a la cadena británica BBC.
El secretario general de la OTAN, el noruego Jens Stoltenberg, fue otro de los invitados a la misa, en la que agradeció al Reino Unido 'su sacrificio' durante 'tantos años en Afganistán'.
El Reino Unido puso fin a sus operaciones en el conflicto el pasado 26 de octubre, mientras que la OTAN dio por terminada su misión en Afganistán en diciembre. EFE