Barranquilla y el Caribe colombiano han venido experimentando en los últimos años un desarrollo integral desde el sector privado, gracias a un proceso de reasentamiento industrial, jalonado por las grandes ventajas competitivas y comparativas que ofrece el territorio.
El apoyo mutuo entre los sectores público y privado, han hecho que la región se vuelvga atractiva para la ubicación de empresas grandes y gigantes.
Un buen ejemplo de eso es la ubicación de la planta de Ternium, en Palmar de Varela, que abrió el camino para que Bavaria se decidiera a emprender el ambicioso proyecto de construir la Cervecería del Atlántico en el mismo municipio.
Se trata de industria gigantes, asentadas en un territorio en el que antes solo se hablaba de actividades agrícolas o ganaderas y que ahora, con el impulso de la industria manufacturera, se transforma en una región con un desarrollo propio.La llegada de nuevas y grandes empresas al Caribe colombiano supone siempre un antes y un después, ya que generan bienestar entre la comunidad vecina.
No solo se trata de los empleos directos e indirectos que se derivan de la propia operación de la planta, sino también del jalonamiento a emprendedores locales que tienen la posibilidad de convertirse en proveedores de estas gigantescas fábricas.
Porque además de las empresas colombianas o con parte de capital nacional, también están llegando multinacionales con capitales netamente extranjeros, que supone un gran impulso a la economía local y regional en los diferentes aspectos.
Desde entidades como ProColombia y ProBarranquilla, se impulsa el asentamiento de estas grandes industrias, para lo cual se busca siempre el respaldo decidido del sector público que, en el caso de Barranquilla, ha sido eje fundamental en la estrategia de captar este rubro económico de compañías que buscan reasentarse.
Barranquilla y el Caribe colombiano cuentan con un gran potencial portuario y logístico que lo hace un territorio con grandes ventajas respecto al resto del país, ya que producir cerca del mar, hace que bajen los costos de fletes y por ende las empresas sientan mejoras sustanciales en sus finanzas.
Es verdad que todavía hace falta mucho camino por recorrer en materia de infraestructura, servicios públicos y hasta en seguridad tanto física como jurídica, pero se han dado pasos gigantes en todos los sentidos.
La unión de las diferentes fuerzas vivas de la región han cohesionado una alianza en la que la comunidad es la gran beneficiada, por el movimiento de una economía dinámica y eficiente.





















