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Desde que planteó su tesis para ser arquitecta, Michelle Aleman Cure sabía que quería trabajar para dignificar la vida de las mujeres del Caribe colombiano. Por eso propuso un centro de emprendimiento que acogería, sobre todo, a aquellas que han sido víctimas de violencia o que son cabeza de hogar. Lo veía como un 'sueño lejano', pues sabía que para lograrlo necesitaría una gran cantidad de dinero y quizá contar 'con el apoyo del Distrito o la Gobernación'.

Sin embargo, a finales de julio de este año y motivada por su vocación de servicio, Michelle se decidió a empezar con algo más pequeño: un showroom en el que reuniría a un grupo de mujeres emprendedoras para promover sus productos y generar ingresos. Así nació The Local Project, una iniciativa que además de vender, busca visibilizar el trabajo de las mujeres de la Costa caribe colombiana.

El proyecto comenzó a planearlo a finales de julio, Michelle no tenía nada seguro, pero sí contaba con el apoyo de sus amigas más cercanas. Ellas y otras mujeres que se sumaron en el camino, le consignaron el dinero necesario para contar con un stand dentro del showroom. Eso significó para Michelle un voto de confianza que la impulsó sacar adelante esta iniciativa.

'Cuando me di cuenta ya tenía 20 emprendedoras con su stand pago y ahí dije: ya con esta plata me gustaría meter a mujeres que no tienen el dinero para estar'.

En total fueron 10 las mujeres emprendedoras contactadas para participar en el evento. Michelle las localizó por medio de la Primera Dama del Distrito, Silvana Puello, a quien acudió para proponerle su iniciativa y así contar con varias de ellas en la primera edición de The Local Project.

Sin embargo, hubo un momento en el que ella creía que el evento 'sería un desastre', pues, en un principio, estuvo pensado para realizarse desde el miércoles 25 hasta el viernes 27 de agosto, pero las fuertes lluvias que se registraron en la ciudad le cambiaron los planes.

'Movimos la fecha y todos los días estuve triste porque no llovía, pero dejé todo en manos de Dios y el 1, 2,3 de septiembre hubo sol todo el día y ahí me di cuenta que fue algo de Dios'.

Durante esos días, las visitas 'explotaron' y las metas no solo se cumplieron, sino que 'superaron las expectativas' en las que 'todos los que participaron se vieron beneficiados'. A sus 22 años, Michelle había superado su primer gran reto y cuenta que 'espera ir por más'.

Esta barranquillera actualmente se encuentra planeando la segunda fecha del evento, que estima realizar en diciembre y mucho más grande que su primera versión. Michelle pretende continuar con este tipo de proyectos porque así 'aportan al crecimiento' económico no solo de las mujeres que allí se presentan, sino de todas las personas que contribuyen desde sus áreas para que estos espacios se lleven a cabo.

'Si yo crezco, todas crecemos. Esa es mi idea en el mundo: aportar y servir a las personas (…) Me siento emocionada porque sé que esta es una pequeña parte de las ganas que tengo de realizar proyectos aún más grandes. No pensé que sería tan rápido, pero de verdad tengo que confiar más en mí porque todo el empeño y sacrificio que le puse tuvo sus frutos. Todos confiaron en mí y me da demasiada satisfacción porque desde niña dije que quería ayudar a todos los que pudiera'.