La tienda, que se hizo célebre en la década de los sesenta y setenta en Barranquilla estaba ubicada en la calle 53 entre carreras 46 y 50. Pese al cierre, quedó inmortalizada entre los barranquilleros por ser la primera en traer a la ciudad las escaleras eléctricas, por la calidad de sus servicios y los conciertos concursos y desfiles que solía realizar en sus instalaciones. La cadena norteamericana se declaró en quiebra este lunes.