A Barranquilla, ciudad en la que estudios de mercado han mostrado que por cada $100 que gasta un ciudadano, $60 los destina para alimentarse, llegará en el primer trimestre de 2020 un modelo de negocio inmobiliario que apunta a contribuir al proceso de expansión de restaurantes y marcas que tienen como actividad la elaboración de productos alimenticios.
Cocinas Ocultas SAS tendrá en la capital del Atlántico la apertura de una propiedad donde concentrarán y funcionarán 20 centros de producción de alimentos con las exigencias de la industria gastronómica. El barranquillero Andrés Vélez Quintero, CEO de esta organización, explica que esta propuesta y emprendimiento surgió hace más de dos años como resultado de la irrupción de las empresas de base tecnológica que tienen como servicio vender productos a domicilio.
'Las plataformas tienen distintas estrategias para vincular restaurantes y consideramos que el negocio inmobiliario está fuera de su foco y nosotros estamos allí como proveedores para contribuir al proceso de expansión de marcas de restaurantes y nuevos negocios que puedan tener un producto delicioso y aspiran a profundizar el mercado a través de las plataformas'.
Cocinas Ocultas nace de una iniciativa de los italianos Rafael Sertorio y Edoardo Dellepiane, socios de Andrés Vélez Quintero, quienes conquistaron un mercado de clientes en Bogotá con una marca que promovía el consumo de alimentos preparados con corte hawaiano.
Cuenta Vélez Quintero que iniciaron en un pequeño local y ante el éxito de su propuesta y ventas a domicilio decidieron ampliar su cocina. En la búsqueda y gestión de buscar un buen lugar se encontraron con dificultades.
Los emprendedores italianos buscaban ampliar su cocina y que esta permitiera estar estratégicamente ubicada para atender la demanda y reducir los tiempos de pedidos a domicilio.
Cuando un dueño de un restaurante o una marca decide invertir en un local, adecuarlo, cumplir los requisitos de uso del suelo, que esté en el lugar y definir el contrato de arrendamiento en promedio el tiempo y capital puede elevar los costos, indica Vélez Quintero. 'Entre el momento en que el inversionista decide y abrirlo hacerlo puede demorar entre 6 y 8 meses'.
De esta barrera y necesidad del mercado surgió la propuesta de Cocinas Ocultas. El CEO dice que, para elegir la propiedad donde funcionarán las cocinas, estudian el mercado de las marcas y cuáles son los centros de población que más hacen sus pedidos.
'Disponer del servicio nuestro, que hemos denominado como conéctate y opera, es de un día para otro. La inversión solo se reduce a los equipos de cocina y esta resulta ser de menos riesgo. El restaurante sólo tiene que llevar sus aparatos, elementos de producción y el personal. Nuestros espacios cumplen con todas las normas del uso del suelo y del Invima', afirma Vélez Quintero.
Hace más de un año el CEO de Cocinas Ocultas dirige el modelo del negocio tras tener la experiencia de la expansión y la elección de inmuebles de otras marcas como Bodytech y McDonald´s en Colombia.
Cocinas Ocultas tiene presencia con la operación en propiedades adecuadas para 50 cocinas en Bogotá, y otro número en Medellín, Cali, en Perú y Panamá. Barranquilla y Costa Rica son los nuevos destinos en los que preparan su aterrizaje.