La importación de calzado de tenis, baloncesto, gimnasia, entrenamiento y calzados similares tuvo una variación entre 2017 y 2018 del 66%, según la Dian, que precisó que de 965.748 pares que se compraron en el exterior y entraron al país en 2017, pasó a 1.608.198 en 2018. Esta es solo una muestra del tamaño que mueve este segmento de la moda, que ha creado hasta una cultura de coleccionista de zapatos deportivos.
El barranquillero Christian Char Rozo asegura que el interés como coleccionista de zapatillas deportivas y de marca lo ha llevado a pagar por un par hasta $4 millones. 'He pagado dos o tres pares por ese valor. Son de la marca Nike y Balenciaga, los más costosos'. Char, de más de 1,80 metros de estatura, cabello largo recogido, pendientes en sus orejas, cuenta que nació en los 90, cuando el basquetbolista estadounidense Michael Jordan empezaba su reinado y consolidaba su marca. Jordan es considerado como un ícono del deporte, y con sus hazañas en las pistas y los modelos exclusivos de botas para jugar baloncesto diseñados por la Nike, le dio estatus al calzado deportivo.
Christian Char dice que su afición de coleccionista de zapatos deportivos comenzó hace tres años, aunque había comenzado con modelos de calzado son de hace una década, le ha dado para ser uno de los principales representantes de la Región Caribe en el 'SneakerSociety'.