Sergio Chams hijo evoca su infancia en Carnaval con una imagen de su padre, el empresario Sergio Chams Salum, en un palco en la vía 40, gritando con orgullo al ver una danza: '¡Esa tela la traje yo!'.
Es un recuerdo que muestra cómo el negocio de las telas, en el preámbulo y en las fiestas, se puede considerar de los grandes subsectores que mueve la economía de la ciudad. La presencia de la industria se dimensiona en la exhibición pública del colorido de los vestuarios de los hacedores y artistas de las fiestas.
'Siempre tengo presente aquel momento, porque había una comparsa con una tela que solo la trajimos nosotros', agrega Sergio Chams. Aunque no hay estudios económicos que muestren su impacto, la industria textil se beneficia con lo que generan en vestuarios unos 29.00 mil artistas, que según Carnaval S.A. reúne en sus diferentes desfiles y por lo menos estima que un 50% cambia su vestuario en cada fiesta.
La revista +negocios (+n) consultó a dos de las grandes empresas importadoras de tela en el Caribe colombiano y uno de los almacenes de referencia de las organizaciones del Carnaval para tener una estimación del movimiento económico, que se calcula empieza once meses antes de la celebración.
Desde el Centro Textil S.A.S. (Centex), compañía dedicada al comercio al por menor de productos en establecimientos especializados, se prepara el diseño de las telas, el envío a China, donde se confeccionan, y posteriormente se hace la compra e importación Explica Valeria Jattin, vocera de la compañía, que una vez definidos los diseños en Barranquilla se envían para traer telas 'exclusivas' a los consumidores y clientes. 'El proceso puede durar unos nueve meses para que sean ofrecidos en diciembre, cuando salen las colecciones del Carnaval', señala.
Germán Álvarez, rey Momo del Carnaval 2017 y director de la cumbia La Gigantona, destaca que en el vestuario de una pareja los detalles es lo más costoso. ''Lo más costoso en un vestido de cumbia son los adornos'.
'Generalmente el de la mujer es más costos, porque el del hombre es un vestido muy tradicional que a pesar que le agregamos componentes muy particulares de la cumbiamba. Más que todo a nivel de accesorios como lo que es la mochila, el fajón. En Barranquilla todo el mundo mira la mochila y mira el fajón y dice esa es La Gigantona. Es algo que nos marca, de nosotros, pero el vestido es el vestido tradicional de cumbia blanco, con la elegancia que a nosotros nos gusta tener pero de pronto no hay que hacerle un diseños muy especial pero al de las mujeres si, sobre todo proyectando una muy buena imagen y conservando la tradición', explica Germán Álvarez,