Una vivienda propia es quizá el sueño más importante de millones de jóvenes y adultos en Colombia. En el proyecto de vida de la mayoría de ciudadanos figura la adquisición de al menos un bien inmueble en los primeros puestos de la lista de prioridades, además de estudios y estabilidad laboral.
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Algunos ven la opción de tener casa propia como una garantía de estabilidad y seguridad para su familia, a diferencia de la incertidumbre que suele generar el alquiler; mientras que otros ven en la propiedad una oportunidad de inversión que a largo plazo se convierta en una fuente de ingreso adicional, ya sea a través del arrendamiento o venta con mayor valorización.
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Sin embargo, para muchos este sueño para imposible de conseguir por la cantidad de ingresos mensuales que registran, ya sea como empleado, independiente, informal o emprendedor.
