Son varios los temas que ponen nuevamente a Monómeros en el ojo del huracán. Por un lado hay tensión por la espera de la renovación de la licencia de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos (Ofac)y por el otro están los cuestionamientos que hacen diputados de la Asamblea Nacional de 2015 al manejo de la empresa.
La preocupación por la demora en la renovación de la licencia que vence el 30 de junio de este año fue expresada por el sindicato de trabajadores de Monómeros (Sintramonómeros) con el respaldo de la CGT, en una carta enviada el embajador de Estados Unidos para Venezuela, James Story.
'Por no disponer de la referida renovación de la licencia lo que está poniéndose en peligro es el sustento de las dos mil familias (de los trabajadores), además del equilibrio del agro colombiano, y como consecuencia un impacto devastador en la alimentación en Colombia', dice la carta.
El sindicato afirma además que 'la demora en la entrega de la licencia Ofac por parte de la embajada ha ocasionado mayores perjuicios' contra la empresa, 'además ha alentado a los actores de la toma hostil a actuar con mayor determinación en contra de Monómeros'.
Esta afirmación está respaldada, según una investigación del portal de noticias El Cooperante, de Venezuela, con un documento de 350 páginas enviado por la empresa a la Ofac, en el que le explica que aún se encuentra latente la amenaza de una toma hostil.