María Victoria Trejos, es una pensionada que logró formar su emprendimiento gracias a los talleres enfocados al adulto mayor que ofrece el Fondo Porvenir. Ella se vio obligada a pensionarse anticipadamente, pero sentía que todavía podía trabajar de menera independiente y comenzó a formar parte del programa ‘Disfrutando tu Porvenir’ en el que recibió capacitaciones, formación en talleres, entre otros.
'En 2019, Porvenir nos invitó a los emprendedores pensionados a hacer parte de un curso con la Universidad del Rosario e hicimos algo interesante durante cinco meses en emprendimiento en el que participamos 51 pensionados', expresó.
Con ese aprendizaje María Victoria fortaleció su propio emprendimiento, es máster en programación neurolingüística y coach asistida por caballos.
'En 2020 con la pandemia quedamos manicruzados y nos tocó acercarnos a la virtualidad para continuar trabajando con mi emprendimiento que antes era presencial y Porvenir me abrió las puertas como mentora del Reto 21, que consiste en hacer un acercamiento durante 21 días con diferentes propósitos y logramos trabajar con la comunidad poco a poco, invitamos por redes sociales y la gente se fue uniendo. El primer Reto 21 fue en mayo y el segundo fue en octubre, trabajamos con el pensionado emprendedor y al final hicimos la feria virtual del emprendimiento', precisó.
Este año el Reto 21 será en octubre, allí conectaremos a los pensionados durante 21 días con diferentes expositores que comparten temas acerca de emprendimiento, salud, entre otros.
'A nuestra edad hacer un emprendimiento no simplemente es hacer una empresa de la que vayamos a vivir, sino, por ejemplo, escribir o hacer su propio libro, cantar o tocar guitarra, o hacer talleres o encuentros con nuestros amigos, hacer esos sueños que tenemos frustrados y que por muchas cosas no sacamos adelante, o por ejemplo yo se tejer e hicimos un taller llamado Tejiendo Esperanzas, hicimos proyectos hermosos de emprendimiento con pensionados', sostuvo Trejos.
Manifestó que con sus hijos Juan Camilo y Ernesto tienen la Fundación Proyecto Guajira para llevar bienestar a los niños, y en el mes de diciembre, Porvenir les compró unos tapabocas con hermosos diseños wayuu que dieron como regalos en Navidad. Ese dinero del emprendimiento se consolidó llevando mercados y juguetes a los niños en La Guajira.
'El Fondo Porvenir me acogió como emprendedora para que enseñara y transmitiera a los emprendedores pensionados bienestar y les dijera si yo puedo ustedes también pueden', indicó María Victoria, quien con lo que gana con su emprendimiento, patrocina a sus nietos Sofía y Emilio en competencias de BMX.