Cada mes Colombia importa en promedio más de 190 mil toneladas de acero y produce otras 100 mil, según cifras de la Cámara Colombia de Acero. Asoportuaria agrega que el 70% de este comercio entra por los puertos de Barranquilla, pero la dinámica lenta de la apertura de sectores productivos como la construcción, la industria y el comercio de ferreterías en medio de la pandemia de la COVID-19, ha generado acumulación de carga en las terminales.
Andrés Ramírez Sánchez, director Ejecutivo de la Cámara Colombiana de Acero (Camacero), dice que al contar los inventarios que llegaron y alcanzaron a producir antes de la pandemia, sumado a los pedidos hechos desde el 15 de marzo a la fecha, hay más de 500.000 toneladas.
'Tanto las fábricas como los puertos están llenos, pues el sector se reactiva muy lentamente. Es nulo el consumo en este momento', señala.
Raúl Pérez, director comercial de Palermo Sociedad Portuaria, dice que 65.000 toneladas de acero y tubería sin nacionalizar ocupan más del 90% de la capacidad de este puerto.
'La cuarentena generó un embudo en la cadena logística, porque el acero siguió llegando, pero su manufactura se suspendió. Aún siguen llegando pedidos de acero que se hicieron antes de la cuarentena y esto genera estrés a la industria del acero, pues no tiene recursos para nacionalizar la carga (hay que pagar IVA y aranceles). También genera estrés en los puertos porque no hay espacios libres para el almacenamiento'.
La falta de liquidez de los compradores de materia prima, pedidos acumulados por la parálisis del aparato productivo y una reactivación que comenzó el pasado 27 de abril con el regreso de la construcción y obras civiles, llevó a Camacero a proponer al Gobierno nacionalizar el producto en las bodegas de los dueños de las importaciones mientras acelera la cadena. Andrés Ramírez dice que esta iniciativa no ha tenido respuesta por parte del Ministerio de Hacienda.
La otra opción que se ofreció al Gobierno fue disponer de esas cargas en terminales alternas a los puertos. Esta es una medida de alivio, pero también representa un gasto a los propietarios mientras cumple procesos de salida.
'La Dian respondió que no se podía. Permitió habilitar lugares de almacenamiento temporales. Minhacienda, que tiene la facultad de darnos esas facilidades no respondió. Podría decir que el cese de operaciones del sector ya nos ha costado más de 1 billón de pesos colombianos. Afortunadamente desde este lunes el nuevo decreto permite desde el 11 de mayo a las ferreterías la venta al por menor y por mayor, ya que es clave para la distribución del material'.
Según el Ministerio de Transporte, la carga de acero importada en el primer trimestre representó el 3% y una variación negativa de 38% comparada con el mismo período de 2019.
Barranquilla disminuye carga. Los transportadores de carga por carretera agremiados en Colfecar, reportaron que por la coyuntura de la COVID-19 se han presentado reducciones en las operaciones del sector entre el 30% y el 60%.
Bogotá es la segunda ciudad de origen de los viajes, pero experimentó una disminución del 41,5%; Barranquilla está en el tercer lugar con una disminución del 29,3%.