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Elevar la participación de la generación con fuentes renovables en la matriz energética de Colombia a un 12% en 2022 es una de las metas del Gobierno nacional y hace parte de la transformación energética.

Este cambio representa aumentar 50 veces su capacidad instalada para generación de energías provenientes del sol y del viento, pasando de menos de 50 MW en 2018 a 2.500 en 2022.

La ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez, presentó en la reunión anual del Foro Económico Mundial realizada en Davos, Suiza, los avances del país en la incorporación de energías renovables provenientes del sol y del viento a la matriz eléctrica.

'Colombia ha sido destacada en este escenario por el salto que va a dar en energías renovables no convencionales como la energía solar y eólica, pues pasaremos de tener menos del 1% de participación en la matriz de estas fuentes en 2018 a más del 12% en 2022. Este es uno de los saltos más rápidos en estas nuevas energías, y por eso el caso de Colombia ha sido uno de los ejemplos destacados en los diferentes paneles de discusión', aseguró la ministra Suárez quien tomó parte en diferentes conversatorios.

La funcionaria afirmó que se espera que el país reciba inversiones por unos $7,5 billones con la incorporación de las fuentes de energías renovables no convencionales.

'Hay algo que no podemos olvidar y es que con la tecnología disponible ahora, necesitamos el gas en la matriz energética, porque las energías del sol y del viento son variables y necesitamos establecer una matriz que responde a la demanda. Colombia, en las proyecciones, puede perder su autosuficiencia de gas en 2024, así que necesitamos encontrar otras fuentes de gas', sostuvo la ministra.

Sin embargo, recordó que aún con este panorama, los combustibles fósiles seguirán siendo una necesidad.

'El país invertirá fuertemente en estas energías limpias, sin embargo, no podemos desestimar el hecho de que aún necesitamos el gas para al menos los próximos 10 años, a menos que la tecnología haga una innovación grandísima que nos lleve a no necesitar petróleo y gas, pero esta tecnología tiene que llegar antes de desechar las otras fuentes energéticas', destacó la ministra.