El Puerto de Cartagena recibe el 90% de los cruceros que llega a Colombia aseguró la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Claudia Lacouture, durante la apertura de la oficial a la nueva temporada de 2017-2018 realizada en las instalaciones de la Sociedad Portuaria de Cartagena.
La saliente titular de la cartera de Comercio, Industria y Turismo aseguró que de los 207 cruceros que llegaron en 2016 a Colombia, Cartagena recibió la mayor parte, tanto de barcos como de pasajeros, con 190 recaladas (llegadas de buques) y 289.331 personas. Le siguen Santa Marta con 16 recaladas y 14.168 pasajeros y San Andrés, con una recalada y 83 pasajeros.
Indicó que el turismo de cruceros impacta positivamente al empleo. 'Son más de 30 guías de turismo que ocupa la llegada de cada crucero y la derrama económica en los gastos de los turistas es de 98 a 130 dólares por día en gastronomía, compras, servicios públicos y destinos turísticos', añadió.
De acuerdo con las cifras entregadas por la Sociedad Portuaria de Cartagena, las divisas generadas por el turismo de cruceros en la economía de la capital de Bolívar en 2016 ascendieron a 54 millones de dólares, un 15% más que en el 2015.
Buenas cifras. En el primer semestre de 2017, comparado con el mismo lapso de 2010, el número de pasajeros de cruceros creció el 17%, al pasar de 172.058 en 2010 a 200.541 en 2017. En el arribo de barcos se pasó de 130 a 132, con un crecimiento del 1,53%.
Lacouture dijo que el aumento de pasajeros en el primer semestre de 2017 se debe a las acciones desarrolladas por el Gobierno para dar a conocer sus puertos, sus ventajas al hacer parte de los itinerarios de las empresas navieras y a la participación constante en reconocidas ferias internacionales.
En la temporada 2016-2017 llegaron a la ciudad 537.216 visitantes, con un crecimiento de más del 700% frente al 2007 cuando se reactivó esta industria en el país.
Los retos
La ministra aseguró que el primer reto para el sector es 'creernos el cuento, saber de las oportunidades y volvernos profesionales en turismo'.
El segundo, es mirar las oportunidades que tiene el turismo en el posconflicto y el tercero la institucionalidad. 'Tener buenos servicios, contar con reglas claras y regulaciones efectivas, cumplir con las formalizaciones y capacitarnos debidamente', señaló.
