Entre 2015 y 2016, la deuda del sector público colombiano creció nominalmente en $35 billones pues pasó de $452,5 a $487,5 billones; mientras que, como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), decreció 0,1 puntos porcentuales al pasar de 56,6% a 56,5% en el mismo período.
Así lo dio a conocer el contralor general de la Nación, Edgardo Maya Villazón al presentar los informes ante el Congreso de la República sobre la situación de las finanzas públicas y la deuda pública del país.
Explicó que en 2016 el Gobierno sufrió un deterioro importante de su posición fiscal con un déficit de 4% como proporción del PIB frente a un resultado de 3% de 2015, lo que significa un punto porcentual adicional.
El funcionario calificó como preocupante el hecho de que mientras los ingresos del Estado perdieron entre 2013 y 2016, casi 2 puntos porcentuales como participación del PIB, los gastos se han mantenido constantes, a pesar de los recortes presupuestales anunciados, que llegan hasta el 19% entre esos mismos años.
Informó que el balance de las finanzas públicas de Colombia, durante 2016, arrojó un déficit global del Sector Público Consolidado equivalente a 3,2% del PIB, inferior al de 2015 que fue de 3,5%.
En su presentación el funcionario sostuvo que el desempeño fiscal y financiero del Estado en 2016 estuvo influenciado por los 'vaivenes de los mercados internacionales, los menores precios del petróleo, los procesos de devaluación de la moneda nacional, la aceleración de la inflación, el déficit externo de la cuenta corriente, la caída del recaudo tributario, los gastos inflexibles, las fallas en la ejecución de los recursos y los crecientes niveles de endeudamiento'.
Esta situación, según Maya Villazón, refleja las debilidades estructurales de la economía nacional y de las finanzas públicas.
Indicó que la deuda del Gobierno alcanzó 43,7% del PIB en 2016, mientras que hace cinco años representaba el 33,7%. Destacó que al cierre de cada vigencia, el saldo de deuda se ha ubicado por encima de lo proyectado en el Marco Fiscal publicado en junio de cada año.
'Las proyecciones del Gobierno en el Marco Fiscal que muestran una senda decreciente de deuda, suponen un nivel de ingreso superior al gasto. Este es un supuesto fuerte que contrasta con los resultados recientes, pues hemos observado déficit primario al cierre de las últimas vigencias', dijo Maya Villazón.
Aseguró que el Gobierno debe disponer de una estrategia diseñada para garantizar la sostenibilidad de la deuda, en los términos planteados en el Marco Fiscal.
'Debe mostrar dónde encontrará nuevas fuentes de ingreso o cómo reducirá la inflexibilidad del gasto de forma que le sea posible alcanzar el resultado previsto', señaló.
