Junior no logró el triunfo, pero sin duda alguna no fue por afición. El llamado jugador número doce no sólo acompañó, sino que apoyó, respaldó y empujó durante los 90 minutos, metidos 100% en un partido cargado de adrenalina de principio a fin.
La hinchada rojiblanca apoyó, respaldó y empujó los 90 minutos, viviendo un vaivén de emociones en el empate de su equipo (1-1) ante el Chicó FC.
Junior no logró el triunfo, pero sin duda alguna no fue por afición. El llamado jugador número doce no sólo acompañó, sino que apoyó, respaldó y empujó durante los 90 minutos, metidos 100% en un partido cargado de adrenalina de principio a fin.