Miguel Borja no le falló a la cita con el gol. El delantero cordobés anotó el segundo tanto de su equipo, tras un volea dentro del área que sorprendió al arquero Sebastián Viera, dejándolo estático.
El atacante colombiano, que se ha declarado una y otra vez hincha del Junior, no quiso celebrar el gol y pidió perdón a la afición rojiblanca.
Borja fue de menos a más en el partido, completando un buen segundo tiempo. El cordobés aprovechó los espacios que le brindó el rival y capitalizó una de las opciones que tuvo.
Al final, el cordobés fue sustituido y se fue al banco en medio de los aplausos de una afición rojiblanca que reconoció su trabajo y agradeció el gesto que tuvo en el gol.