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Un grupo de integrantes de la barra de los Kuervos se reunirá este lunes con el administrador del estadio Metropolitano Roberto Meléndez para responder por los daños que ocasionaron en el partido de vuelta la final de la Copa Águila entre Junior y Nacional, que se disputó el pasado 17 de noviembre.

El partido tuvo que ser suspendido por los desmanes entre integrantes de la barra y la Policía. Uno de los líderes de la barran reconoció que lo que hicieron no estuvo bien, pero asegura que el dolor de ver perder a Junior el campeonato fue 'muy grande'.

'Vamos a ir un grupo de los líderes de la barra para evaluar los daños que se ocasionaron. Vamos a ver qué precio tiene el arreglo y vamos a analizar cómo vamos a hacer las reparaciones. Nada justifica los hechos de violencia ocasionados en la tribuna y mucho menos dañar la infraestructura del estadio, somos los responsable y vamos arreglar eso. Muchos no entienden nuestra pasión, pero para nosotros perder un campeonato es como perder un familiar, no es justificables los actos violentos por eso estamos dando la cara', apuntó uno de los voceros de la barra.

Los Kuervos también quieren hacerse cargo de los daños porque aseguran que vienen en un proceso de resocialización y que quieren dejar una buena imagen. 'El proceso en el que venimos trabajando es algo serio y queremos simplemente empezar a retomar eso. Nosotros teníamos más de cuatro años que no se formaban desmanes dentro de la tribuna y desde hace dos años estamos en un cambio', agregó el vocero.

Reiteran que se equivocaron y esperan enmendar el error. 'Como seres humanos cometemos errores, esta es una pasión que simplemente que muchos no entiende. Nosotros viajamos y pasamos necesidades, en otras ciudades nos tratan mal y todo esto es por ver a Junior. Es un sentimiento por los colores', sentenció.