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Un bostezo, un regaño, un gol, la mala puntería de Édison Toloza y Junior le dio la bienvenida a Julio Comesaña en su sexto período como adiestrador juniorista con un triunfo pírrico ante Envigado, con anotación de Jossymar Gómez, al minuto 46.

El bostezo vino con un insípido primer tiempo, el regaño con las palabras del colombo uruguayo en el camerino durante el entretiempo que pusieron a volar, aunque por corto tiempo, a sus dirigidos; la desesperación de la hinchada con la mala puntería de Édinson Toloza y el triunfo de Junior después de tres fechas mordiendo el polvo de la derrota y que lo saca de los incómodos 15 puntos para seguir dentro del grupo de clasificados de la Liga Postobón I, en el séptimo lugar.

La Heroica sigue teniendo buena espalda para Junior que se mantiene invicto con una sexta victoria en siete encuentros y le dio la bienvenida a su nuevo adiestrador cosechando los tres puntos, una instancia que repitió por cuarta vez en esta cancha estrenando técnico y en donde Julio Comesaña también había arrancado su tercera etapa como jefe del banquillo juniorista, en 1996 con un triunfo ante Unión Magdalena.

La historia de los noventa minutos de anoche en el Jaime Morón, con 4433 espectadores presentes, se valoró por el triunfo, por la recarga emotiva que esto significa para un plantel azotado por las críticas y las presuntas divisiones internas, pero con una demostración colectiva que no alcanzó para saciar el hambre de buen fútbol.

Junior fue eficaz, pero nada vistoso. Salió del atolladero de los resultados y con eso le bastó al grupo para despedirse de Cartagena y comenzar a escribir una mejor etapa en su lucha por no perder su cara de aspirante a la estrella.

El fútbol del equipo rojiblanco en la primera parte naufragó. Cayó en el olvido rápido tras el pitazo de Wilson Lamoreaux para el descanso. Distante de ser un elenco con autoridad por su improvisada localía, el conjunto tiburón se fue a las duchas con un saldo en rojo en puntería, porque de sus cuatro aproximaciones, solo el lanzamiento de costado de Juan Guillermo Domínguez desviado por el cancerbero Víctor Hugo Soto, fue la única con acertada dirección.

Se rescatan de los primeros 45 minutos el rol de Johnny Ramírez para sacar al equipo desde el fondo, dar el primer pase con seguridad y sus lanzamientos cruzados para la salida del Johnny Vásquez en su papel de marcador por la derecha.

Comesaña observó el juego en un palco del Jaime Morón.

De resto, las alternativas en ataque fueron nulas. La cara adusta, y carente de reacción ante los enardecidos reclamos de la tribuna, de Julio Comesaña cuando descendió al camerino, resumieron el fútbol de su equipo en el arranque de su sexta etapa como adiestrador.

Envigado tuvo la primera llegada del juego, y la única de la parte inicial, gracias a una descolgada de Fabio Burbano, quien en un arranque a velocidad explotó la espalda del barranquillero César Fawcett.

El elegido de Comesaña para el frente de ataque, Édinson Toloza, estuvo desacertado en las dos acciones frente a la puerta naranja. Al minuto 20 no conectó un servicio de Luis Quiñones desde un costado, pero la cabeza del nariñense no llegó al contacto. Luego un remate por encima cuando expiraba el primer período.

Tras el paso por el vestidor en la etapa de descanso, Junior salió arrollador. En tres minutos levantó de la butaca al hincha, conjugó buen fútbol y marcó la ventaja en la pizarra a su favor.

Tras un rebote luego de un tiro de esquina, el samario Jossymar Gómez mandó un latigazo al ángulo superior de la mano derecha de Soto para marcar el primer gol del choque, luego de tres partidos en los que siempre estuvo por debajo en el marcador. El mediocampista debió retirarse en el minuto 82 golpeado y sustituido por Vladimir Hernández.

Fue el mejor pasaje de Junior en todo el partido, un reencuentro con una hinchada que lo respaldó con un atronador aplauso en ese instante cuando Juan Guillermo Domínguez, Michael Ortega y Luis Quiñones se juntaron en una triangulación con maestría que puso a soñar con un segundo tiempo pletórico en fútbol y emociones. Pero fue solo un amague.

Las siguientes líneas del equipo de Comesaña fueron las del alumno que trabaja para los seis puntos de calificación en trabajo colectivo. Defendió con eficacia, resguardó la ventaja, no se dejó sorprender, pero arriba no pudo ampliar la ventaja por falta de puntería.

En la columna de lo destacados, Sebastián Viera detuvo dos pelotas importantes, Johnny Ramírez fue clave en la inicial al igual que Johnny Vásquez y ‘Pecoso’ Correa bastión para el complemento.