Para un padre no hay mejor orgullo que ver a sus hijos cumpliendo sus sueños. Ese es el caso que vive Antonio Pardo con su hijo, Samuel, quien este sábado firmó un contrato con los Rays de Tampa Bay de las Grandes Ligas.
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Pero esto solo es el comienzo que tiene este joven soñador, pues su gran meta es llegar y afianzarse en el mejor béisbol del planeta. Tiempo tiene para lograrlo y este primer peldaño que logró no es para nada casualidad.
Desde muy chico comenzó con su amor por el béisbol y todo se lo debe a su padre, que relata que desde los tres años empezó a tener sus primeros pininos en esta disciplina.
“Comenzó en el béisbol a los tres años, en la Academia Pelinor, ubicada en el Parque Bosques del Norte, en Buenavista. Desde entonces nació su pasión por el deporte, desarrollándose hasta los 17 años, momento en el que logra una firma con el equipo de Tampa Bay. Durante todo ese tiempo formó parte de las selecciones del Atlántico desde la categoría U8 hasta la U18. En el último año con la selección quedaron campeones a nivel nacional”, cuenta con orgullo Samuel Pardo en una entrevista con EL HERALDO.
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“El gusto por el béisbol viene de familia. Yo también jugué béisbol en el Colegio Sagrado Corazón. Hice parte de la selección Atlántico y de la selección Colombia. Fui presidente del Club Pelinor durante ocho años. Desde pequeño, lo llevo junto con su hermano mayor a la academia, impulsando el amor por el deporte. La familia hizo muchos sacrificios. Viajamos a torneos en Cartagena, Montería, San Mateo, Santa Marta y también en tres ocasiones a Estados Unidos”, complementó.
El padre de Samuel dice que esto no pasa por casualidad. Su hijo, de tan solo 17 años, ha priorizado convertirse en un deportista de alto rendimiento, dejando a un lado, según cuenta, cosas cotidianas que hacen los jóvenes a su edad.
“Ha hecho sacrificios importantes. Dejó de asistir a muchas fiestas y momentos propios de su niñez, por decisión propia, priorizando siempre el béisbol y los entrenamientos. La familia siempre le dio libertad, pero él eligió su camino como deportista de alto rendimiento, señaló.
Variedad de posiciones
Si bien este barranquillero se desempeña como receptor, su padre Antonio cuenta que no siempre ha jugado en esta posición en el campo.
Samuel sabe jugar también como segunda y tercera base, pero eso no es todo. Cuando era niño probó suerte actuando como outfield, shortstop e incluso de lanzador, pero su camino estaba marcador y el puesto de cátcher fue el que lo impulsó a llegar a esta firma.
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“Fue firmado como catcher, pero también juega en tercera base y segunda base. Se ha desempeñado en diversas posiciones desde pequeño, incluyendo outfield, shortstop, y pitcher. En varias ocasiones fue nombrado champion outfield, champion base, y champion en carreras anotadas. Actualmente, se encuentra en el complejo de los Rays de Tampa Bay en República Dominicana, donde juega tanto de catcher como de infielder”, afirmó el padre de Samuel.
Decisión de ir fuera del país
El camino para llegar a donde hoy está no fue para nada fácil. Tuvo que aceptar que en su país natal no tendría la oportunidad que quería y por eso, junto a su familia, se tomó la decisión de irse a jugar a República Dominicana.
“Dada la dificultad para conseguir una firma en Colombia, tomamos la decisión en el último instante de enviarlo a República Dominicana. Esto fue gracias a la orientación de Marcos Beltrán, un padre de familia con tres hijos firmados por diferentes organizaciones, quien recomendó llevarlo allá para que se valorara mejor su talento”, expresó Antonio.

“En República Dominicana fue entrenado por Jesús Guerrero, quien lo promovió con la ayuda del representante Amelson Rodríguez. Participó en tryouts en Medellín, Cartagena, Montería y Barranquilla, sin obtener resultados, por lo cual decidieron trasladarlo. Fue evaluado por varias organizaciones, pero Tampa Bay mostró interés desde el inicio, invitándolo a quedarse en su complejo y entrenar con jugadores firmados. Esta experiencia lo hizo crecer de una manera impresionante. Los managers de Tampa están muy contentos con su desempeño actual”, añadió.
Momento de la firma
Los sacrificios, el estar lejos de su familia, todo eso tuvo su recompensa este sábado. Bien temprano en la mañana se dio su tan anhelada firma con los Rays de Tampa Bay, novena con la que se seguirá formando y con la que en un futuro espera debutar en las Grandes Ligas.
“Fue firmado oficialmente por la organización de Tampa Bay. Aunque no es una suma alta, pero eso debe a que fue firmado al final del periodo de oportunidad. Si hubiese llegado dos años antes, el bono sería distinto. Sin embargo, lo importante fue la oportunidad, más allá del monto. El contrato no es limitado, se renueva anualmente en función del rendimiento, comportamiento, disciplina y desempeño general en torneos. Estudia en el British International School. Es el único que habla inglés en el complejo en Dominicana, lo cual ha sido una ventaja al comunicarse con entrenadores estadounidenses”, concluyó Antonio Pardo.
