Con un gol mágico en el último suspiro, un taconazo delicioso como recurso, el colombiano Luis Muriel dio la victoria al Atalanta ante el Milan (3-2) en un partido abierto, disputado y entretenido en el que, eso sí, se volvieron a ver las costuras 'rossoneri', las de un equipo que transita en la incertidumbre y cada vez más alejado del liderato.
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Muriel con un tacón y Ademola Lookman con un doblete y una exhibición ante su público hurgaron en la herida abierta de un Milan incapaz de paliar su problema en la enfermería.