Nada se le resiste esta temporada al neerlandés Max Verstappen (Red Bull), ni siquiera un Gran Premio en el que nunca había subido al podio, el de Italia, en territorio de sus grandes rivales, los Ferrari, con el ambiente en contra en Monza y saliendo desde la séptima plaza de parrilla, seis por detrás del monegasco Charles Leclerc, quien no pudo brindar el triunfo a los aficionados de Monza en el 75 aniversario del Cavallino Rampante.
Los seguidores de Ferrari tuvieron que conformarse con el segundo puesto de Leclerc y el cuarto, con una espectacular remontada (salía 18), del español Carlos Sainz, mientras que Fernando Alonso, que igualó el récord de carreras del finlandés Kimi Raikkonen (349) en la categoría reina del automovilismo, tuvo que abandonar cuando luchaba por los puntos.
Verstappen, que lleva once triunfos, cinco seguidos, y va camino de la mejor marca en una misma temporada (13 de los alemanes Michael Schumacher y Sebastian Vettel), ya empieza a sacar la calculadora, con opciones de ganar su segundo título mundial en la siguiente prueba, el Gran Premio de Singapur, el 2 de octubre.