Fue un juegazo. Los lanzadores de ambos equipos se subieron al montículo y dieron cátedra de pitcheo, pero los Piratas de Pittsburgh, sin conectar siquiera un hit en todo el juego, terminaron festejando la victoria frente a los Rojos de Cincinnati, este domingo ante 10.559 espectadores en el PNC Park, en la ciudad del estado de Pensilvania.
Uno de los protagonistas de este cerrado duelo en casa de los corsarios fue el colombiano José Quintana. El zurdo de 33 años de edad, trabajó siete entradas completas y apenas toleró tres imparables y concedió una base por bolas. Propinó cinco ponches y no permitió carreras, pero se fue sin decisión porque la rayita de la victoria la anotaron en la parte baja del octavo inning, cuando ya el bolivarense había sido relevado.
¿Cómo ganaron sin batear un inatrapable? Hunter Greene, abridor de los visitantes, evitó que le conectaran de hit, pero dio cinco tiquetes gratis, dos de ellos en el octavo capítulo (Rodolfo Castro y Michael Pérez) antes de ser sustituido por Art Warren, quien le dio base por bolas al primer hombre que enfrentó, Ben Gamel, y llenó las bases.
Green, que propinó nueve ponches en siete innings y un tercio, solo había colgado un out cuando se retiró del compromiso en la octava entrada. Con las almohadillas ocupadas, Warren encaró a Ke’Bryan Hayes, quien bateó un roletazo hacia el segunda base, Alejo López, quien pasó la bola al paracortos Matt Reynolds y forzó out en la intermedia a Gamel. Reynolds mandó la pelota de inmediato a la inicial para completar el doble play (para eso daba la jugada), pero Hayes fue veloz y llegó quieto. Mientras eso sucedía, Pérez arribaba a salvo a la tercera y Castro anotaba.