No fue el mejor juego para José Quintana. Aunque su equipo, los Piratas, terminaron imponiéndose 5-3 a los Nacionales de Washington, este domingo en el PNC Park, de Pittsburgh, la apertura del colombiano no pasó del cuarto episodio.
El zurdo de 33 años de edad concedió tres bases por bolas, cinco imparables y tres carreras antes de que el mánager Derek Shelton le pidiera la bola y lo sustituyera.
Sin embargo, no todo fue malo para Quintana. El serpentinero, nacido en Arjona, Bolívar, pero criado y hecho beisbolista en Barranquilla, llegó a los 1.400 ponches en sus 10 temporadas en Grandes Ligas.
Los dominicanos Juan Soto y Maikel Franco fueron las víctimas con las que completó la cifra que no ostenta ningún pitcher colombiano. El que más se le acerca, con 1.207 abanicados, es Julio Teherán, que ahora mismo se encuentra sin equipo.
La cantidad de ponches de Quintana demuestra la regularidad que ha tenido su carrera.
En su segunda salida con los Piratas, José Quintana se fue sin decisión después hacer 85 lanzamientos, de los cuales 46 fueron strikes.
Wil Crowe le hizo un gran relevo a Quintana, pero la victoria se la acreditó el relevista estadounidense Heath Hembree, quien trabajó una entrada completa y un tercio. Solo permitió un hit. Ninguna carrera. Dio un tiquete gratis. David Bednar se anotó juego salvado.
El estelar Patrick Corbin, de los Nacionales, también se retiró sin decisión. La derrota la cargó Steve Cishek. En un tercio de acción, toleró tres hits y tres carreras. Además concedió una base por bolas.
Michael Chavis, Yoshi Tsutsugo, Diego Castillo y Ben Gamel empujaron las carreras del triunfo de los corsarios.
Un total de 8.735 aficionados ingresaron al PNC Park, casa de la novena del estado de Pensilvania.