El Barcelona goleó a un competitivo Real Madrid (5-2), selló el pase a las semifinales de la Liga de Campeones y disfrutó de una fiesta histórica para el fútbol en el Camp Nou, que registró un nuevo récord mundial de asistencia en un partido femenino con 91.553 espectadores.
Tras el 1-3 favorable a las vigentes campeonas de Europa, el resultado deportivo, que se decidió en el segundo tiempo cuando las jugadoras azulgranas remontaron un 1-2 en contra, quedó en un segundo plano.
Decía la capitana azulgrana Alexia Putellas que este jueves podía significar el inicio de 'una nueva era'. No le faltaba razón: el templo azulgrana acogía el primer partido oficial con público del equipo femenino de fútbol.