Compartir:

William Alberto Santacruz, el gerente del Deportivo Pasto que insultó y calumnió a Sebastián Viera, arquero de Junior, fue sancionado por el Comité Disciplinario del Campeonato de Fútbol Profesional Colombiano con una multa de $18.170.520 y 'con dos semanas para ejercer cualquier actividad deportiva y/o administrativa relacionada con el fútbol'.

Santacruz lanzó una serie de insultos y ofensas contra Viera en el juego que ‘Tiburones’ y ‘Volcánicos’ igualaron 0-0 en la fecha 18 de la Liga, el pasado 11 de abril.

El gerente del cuadro nariñense, además, publicó en su cuenta en Twitter unas falsas acusaciones contra el guardameta que posteriormente fueron desmentidas a través de un video que dejó en evidencia que el provocador e irrespetuoso fue el empleado del club pastuso.     

La resolución del Comité Disciplinario señala que el gerente del Pasto 'empleo lenguaje ofensivo y grosero contra los jugadores rivales'.

'El Comité tuvo conocimiento de los hechos materia de investigación en atención a una queja disciplinaria en contra del señor William Alberto Santacruz la cual fue presentada por el Club Deportivo Popular Junior F.C. S.A y el jugador en cuestión inscrito con el Club Deportivo Popular Junior F.C. S.A. En la mencionada queja se solicita sancionar al oficial de la Asociación Deportivo Pasto por presunta infracción de los artículos63-G, 72, 75-2 y 116 del Código Disciplinario Único de la Federación Colombiana de Fútbol', se agregó en la resolución.

Junior argumentó  su escrito lo siguiente: 'Desde el minuto 1 del partido, el señor Santacruz comenzó a atacar con insultos y ofensas al jugador y a varios miembros del equipo profesional de Junior, a lo que el capitán respondió pidiéndole a uno de los asistentes arbitrales que interviniera e increpara la conducta del señor Santacruz.(...)Por esta razón, consideramos que la conducta del señor Santacruz es, a todas luces, violatoria del artículo72 del CDU, pues es claro que comprometió el buen nombre tanto de mi representado, de sus accionistas y, por supuesto, del jugador, al realizar declaraciones infundadas y encaminadas, exclusivamente, a generar repudio mediático, más aún cuando quien las realiza es un dirigente del Fútbol Profesional Colombiano, que, en principio, debería ser un modelo ejemplar de rectitud y honradez, como representante de esta industria'.