Agotado, con un once de circunstancias, mermado por las bajas y ante un rival en estado de alarma, el Real Madrid no pudo con el Getafe y empató sin goles en el Coliseum Alfonso Pérez bajo el paraguas del ‘efecto Militao’, que, junto a Courtois, completó un partido sobresaliente pero insuficiente para no dar un paso atrás en la pelea por LaLiga.
Sin Nacho al lado, Militao cambió de compañía y se juntó con un debutante en LaLiga como Víctor Chest para alargar su semana mágica tras triunfar en el clásico ante el Barceleona y frente al Liverpool. Además, contó con la solvencia de Courtois, que salvó al Real Madrid de una derrota casi segura en un partido de supervivencia.
Y es que, después de aguantar al Liverpool, el Real Madrid se quedó exhausto. No sólo con necesidad de aire, también muy mermado en el número de efectivos. Hasta seis de los jugadores que estuvieron en Anfield no pudieron salir al césped del Coliseum Alfonso Pérez.
Entre ellos, dos sorpresas: Kroos y Benzema. Ambos, disponibles entre gran cantidad de bajas, se quedaron en el banquillo. Zidane quería oxigenar a un par de piezas clave y prefirió verles de inicio sentados junto a cuatro canteranos.
Con un once bastante aguerrido, el Getafe salió desde el primer minuto bastante intenso. En general, durante la primera parte, consiguió su objetivo aunque no al completo: se marchó sin premio a los vestuarios. Su carencia de gol es preocupante.
No hubo mucho más. El Getafe se agotó. Pecó de falta de gol. Se fue de vacío y seguirá coqueteando con el descenso. Y el Real Madrid dio un paso atrás en LaLiga.