Compartir:

Para María Fernanda Herazo, María Paulina Pérez, Gabriela Mejía y José Bendeck, cuatro de las principales raquetas del Atlántico, no ha sido sencillo poner en pausa esa pasión llamada tenis. Ellos también se han visto afectados por la pandemia del Covid-19 y tuvieron que alejarse de las canchas y las competencias durante buena parte de 2020.

Sin embargo, la llama por el deporte sigue encendida y esperan que en 2021 puedan volver a disfrutar de toda la fiesta del tenis.

Para Herazo, quien actualmente se encuentra entrenando en Chile, lo más importante es perfeccionar detalles técnicos y, sobre todo, disfrutar sin dejar a un lado sus metas.

'Mis expectativas para el año 2021 son seguir dando lo mejor de mí y disfrutar al máximo del tenis, siendo mi principal meta mejorar el ranking del 2020 (actualmente es la 347 del mundo)', afirmó la barranquillera, quien espera viajar a fin de mes a Turquía.

Retomar los entrenamientos y volver al ritmo que tenían antes, son los mayores retos que algunos tenistas del Atlántico deben afrontar en este nuevo año. Unos ya tienen en orden su calendario, en cambio otros están a la espera de confirmación de torneos para poder organizarse.

José Bendeck no ha definido aún su itinerario, pero sí tiene claras sus expectativas y objetivos para este 2021.

'Debo mejorar mi ranking, quiero entrar entre los 300, ojalá 200 en dobles, pero eso depende mucho de cómo hacen los torneos y de la cantidad que se realicen', expresó el tenista, quien actualmente es 551 en el ranking de la de dobles de la ATP.

Bendeck, quien sufrió una lesión de hombro al retomar sus entrenamientos y la recuperación se le ha dificultado, aspira a poder competir en el primer semestre. Entre marzo y mayo espera volver a Europa para participar en varias competencias.

Por su lado, Gabriela Mejía se encuentra positiva para superar los retos que se le presenten. 'Voy a estar jugando torneos ITF, que son de 18 años, y algunos Cosat de mi categoría (16 años). La pandemia fue muy dura. Veníamos entrenando casi todos los días y paramos casi todo un año las competencia y los entrenamientos', expresó Mejía.

Detener sus entrenamientos a causa de la pandemia fue muy difícil y es por esto que ahora aprovechan el tiempo practicando a doble jornada. Con ganas se preparan para las competencias, aunque algunas aún no tengan fechas seguras por los aplazamientos y cancelaciones que se continúan presentando por el Covid-19.

Para María Paulina Pérez uno de los desafíos tras haberse detenido durante casi un año, más allá de tener que empezar de nuevo, es retomar la confianza en la cancha.

'Bajé mi buena racha y la seguridad con la que venía compitiendo, el estar tanto tiempo fuera de mi deporte me puso un alto en el camino', aseguró.

Pérez, quien continuó su preparación física desde casa durante el cierre de las canchas, espera volver a competir a mediados de febrero. La tenista espera evolucionar en su servicio y fortalecer su rendimiento en el campo de juego para mejorar su ranking WTA (666) y estar entre las 500 o 450 mejores tenistas del mundo para empezar a jugar torneos de mayor nivel.

Aunque para los tenistas del Atlántico sea duro volver a retomar la actividad, ellos no se detienen y aspiran a recuperar poco a poco el nivel y el ritmo que tenían antes.