Esta historia continuará… Cuando ya parecía finalizada la novela de amor, pasión, odio y división en que se ha convertido el período de Jorge Enrique Vélez al frente de la Dimayor, como buen culebrón, el suspenso y las intrigas se extienden por unos capítulos más.
La trama ahora está enfocada en la forma en que Vélez abandonará el trono del balompié profesional, un asunto que también genera diferencias entre los representantes de los 36 clubes socios (20 de la Liga y 16 de la Primera B).
Aunque al menos 19 equipos ( la mitad más uno) ya manifestaron públicamente (la gran mayoría a través de cartas) su deseo de un cambio de mando, Vélez no ha renunciado ni lo piensa hacer hasta que no concrete un acuerdo con una liquidación e indeminización económica que compense en algo 'todo el daño que dice se le ha hecho a su buen nombre' en medio de todas las críticas que ha recibido ejerciendo como presidente de la Dimayor, según palabras de Wálter Ante, presidente de Orsomarso, en diálogo con Blu Radio.
Ante, representante de uno de los equipos de la Primera B del Valle, Hernando Ángel (Quindío), Carlos Ferreira (Alianza Petrolera) y Eduardo Méndez (Santa Fe) fueron los elegidos para entrar a mediar y negociar la manera en que se redondeará la salida de Vélez.
Ángel y Ferreira hacen parte del grupo que de alguna manera estaba a favor de Vélez, mientras que Ante y Méndez son totalmente opuestos a su gestión. Unos consideran que el presidente debe ser indemnizado y otros creen que no.
'No nos hemos puesto de acuerdo sobre cuánto le podíamos pagar. Nosotros consideramos que se le debe cancelar sus prestaciones sociales y todo de acuerdo a lo que expresa la ley, pero don Hernando dice que se le debe dar más plata, una indemnización', contó Wálter Ante.
En todo caso, los cuatro encomendados para el tira y jala que selle el adiós no se han puesto de acuerdo entre ellos mismos y con Vélez, que pide una cifra distante a la que legalmente le correspondería si los socios de la Dimayor deciden actuar unilateralmente con su cargo, que es de libre nombramiento y remoción, con un contrato sin término fijo.
'En el último contacto, a través de Ferreira, dijo que no aceptaba, y proponía unas cifras desbordadas a lo que le estábamos ofreciendo', apuntó el presidente de Orsomarso.
'Vélez dice que la indemnización es el reconocimiento que él pide por dañarle su buen nombre', agregó.
EL HERALDO conoció extraoficialmente que los negociadores de los clubes ofrecen una cifra de 300 millones de pesos y algo más, mientras Vélez exige una cercana a los 900 millones. Así mismo, que el dirigente antioqueño advirtió a Ángel, Ferreira, Ante y Méndez que de no arreglar y ser despedido en la asamblea del próximo viernes, demandará a la Dimayor para conseguir su compensación y a varios de los presidentes por acoso laboral.
'A esta hora no hay ningún tipo de arreglo con el presidente Vélez. No hemos podido lograr el acercamiento frente a lo que él quiere. Simplemente llegamos a una conclusión: si no cede en sus pretensiones, en el seno de la asamblea tomaremos una decisión sobre la salida de él y de lo que debemos pagarle, aunque muchos ya han expresado, como es mi caso particular, que debemos pagarle la parte legal únicamente', explicó Wálter Ante.
Y así, completamente roto el idilio entre el presidente y los socios de la Dimayor, transcurre el desenlace de este novelón que mantendrá el suspenso y el suspenso hasta último momento.
Ya suenan sucesores
Mientras se le pone fin al novelón de la salida de Jorge Enrique Vélez de la presidencia de la Dimayor, ya empezaron a salir al ruedo varios nombres para reemplazarlo.
Además del vallecaucano Gustavo Lenis Steffens, candidato propuesto públicamente por el Deportivo Cali, se han mencionado muchos otros nombres de manera extraoficial: el barranquillero Hernán Yunis, expresidente de Junior; Carlos Mario Zuluaga, presidente de La Equidad; Luis Fernando Jaramillo, vicepresidente de Bavaria; y el empresario César Camargo, hijo de Gabriel Camargo dueño del Tolima.