Los organizadores del torneo de Wimbledon están satisfechos económicamente, a pesar de la cancelación del torneo, que tenía que haber comenzado este lunes en las pistas del All England Club, debido a la pandemia y han confirmado que gracias a su póliza de seguro el club no sufrirá deterioro financiero alguno.
La imposibilidad de reprogramar el evento debido al mantenimiento de la hierba obligó a sus directivos a cancelarlo y acogerse a un seguro que les protegía en caso de pandemia. Su director ejecutivo, Richard Lewis, asegura que las consecuencias financieras serán por lo tanto mínimas.
'En caso de cancelación, es genial tener un seguro', señaló a bbc.com .'Todavía estamos en una buena posición, financieramente estamos estables. El tenis británico está bien protegido. Hemos hecho una reclamación, pero no nos afectará a largo plazo', añadió.
No obstante, no habrá seguro para el próximo año, y Lewis asegura que ese escudo 'no es eterno'.
'En caso de cancelación el próximo año, los gastos de Wimbledon saldrían de su bolsillo porque el seguro ya no sería válido', añade el directivo.
'En el clima actual, es imposible contratar un seguro así. Cuando asumí mi cargo en 2012, había indicios de que las cosas no eran asegurables, debido a las enfermedades contagiosas que ya habíamos visto proliferar, como el SARS o la gripe porcina. Ahora mismo no puedes conseguir un seguro', prosigue.
Las finanzas del tenis británico 'no se verán gravemente afectadas' por la cancelación de Wimbledon, dice Richard Lewis.
La póliza de seguro contra pandemias del All England Club lo ha protegido de pérdidas de hasta un cuarto de billón de libras.
'Todavía estamos en una posición muy buena, lo que es un poco extraño cuando acabas de cancelar los campeonatos, pero somos financieramente muy estables', añadió Lewis. 'Soy optimista en que el superávit estará bastante bien protegido, y por lo tanto el impacto será minimizado'.
Wimbledon, que debía desarrollarse del 29 de junio al 12 de julio, fue cancelado por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial en medio de la crisis del coronavirus.