En su brazo derecho tiene tatuado el nombre de su hijo Gabriel Jr., de 5 años, y en el izquierdo, el de su hija Gabrielys, de 12. Nostálgico, a punto de dejar escapar lágrimas, el pegador venezolano Gabriel Maestre, apodado ‘El Capitán’, confiesa que este sábado debutará como profesional ante Jeovanis ‘El Meke’ Barraza más que motivado por el título Fedebol superwélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB). Presenciando la pelea estarán sus dos retoños junto al gran amor de su vida desde que estudiaba en el colegio, su esposa, Fátima Misel.
'Llegan mañana (hoy) si Dios quiere. Ufff, me emociono mucho (hay un silencio). Hace mucho no los veo y la verdad es que será lindo tenerlos ahí. Mi hijo se pone a gritar, dice ‘papi, dale’ (risas). Yo pienso que él va a ser boxeador. Muchas veces le pongo unos guantes, un bate y un balón de fútbol y escoge los guantes. Dice que va a ser campeón. Le gusta lo que yo hago, eso realmente me llena de orgullo porque ve a su padre como un ejemplo. Todos los golpes que doy son por mis hijos y por mi familia', expresa Maestre, de 32 años y con una trayectoria como amateur envidiable con dos oros en Juegos Suramericanos, uno en Juegos Bolivarianos y actualmente es el campeón de los wélter a nivel Panamericano. Incluso, luego de reyerta ante Barraza, viajará a Lima para defender su título.
No le tiene miedo a debutar ante un invicto y en condición de visitante. Al contrario, considera que es una oportunidad atractiva para demostrar su potencia en el cuadrilátero. Además sabe que el sábado, en el Palacio de Combates, una gran colonia de venezolanos estará apoyándolo.
'Mucha gente dice que por qué voy a hacer mi debut tan tarde, que el boxeo profesional es hasta corta edad, pero yo no creo eso. Mientras que te mantengas saludable y tengas las condiciones de seguir, no hay ningún problema para pelear. Yo me siento joven y con mucha experiencia', revela.