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En la cancha hicieron la ‘fusión’ y la victoria llegó. El equipo Fusión Caribe quiere dejar una huella en Barranquilla no solo por la forma de jugar al fútbol, sino también por la formación de valores. El equipo, que es dirigido por el profesor Fernando Reales, marcha firme en el torneo nacional sub-20.

El pasado sábado derrotaron 2-1 a Unión Delta de Galapa. Gracias a un gol de Eduard Bravo y debido a un autogol, Fusión Caribe logró su segunda victoria en el campeonato. Este equipo es integrado por jugadores de diferentes barrios de Barranquilla y aspiran a seguir creciendo para tener una oportunidad en el fútbol profesional.

Se definen como un equipo trabajador y unido. En la cancha aseguran que no dan un balón por perdido y esa entrega de la que hablan se refleja dentro del terreno de juego.

'Este es un equipo donde somos once guerreros. Nos caracterizamos por nuestra actitud y jerarquía. Antes de salir al campo siempre nos decimos entre todos que no podemos dar una pelota por pérdida. Aquí hay que dejar hasta la última gota de sudor. En este campeonato todos los partidos son finales y hay que correr lo 90 o 95 minutos que dure el partido', sostuvo el arquero José Miguel De La Rosa, de 19 años.

El técnico Reales se enfoca en cultivar los valores como el respeto y la tolerancia. Considera que lo primordial es formar al ser humano. 'Aquí lo primero es formar al futbolista como ser humano. Fusión Caribe quiere dejar una huella en la formación de los valores, por eso queremos muchachos disciplinados y enfocados, porque el fútbol se juega con seriedad', sostuvo el entrenador.

Fusión Caribe espera seguir destacándose en el Torneo Nacional sub-20 y continuar con su filosofía de familia y responsabilidad.